Raúl Menjíbar: Con permiso para enloquecer

madera

El presidente de Porta propone soltarse las trenzas; imaginar sin límites para crear con el material más antiguo del mundo.




En el 2049 las fronteras de lo real biológico y lo 'real' sintético ya no existirán. Humanos y replicantes formarán igualmente la sociedad del futuro cercano, impregnada de alta tecnología. El límite entre lo real e ilusorio no existe, como dice Menjíbar. Eso plantea el imaginario de Denis Villeneuve, en la segunda Blade Runner, que sirve de inspiración a Raúl para motivar a los asistentes a la Semana de la Madera el pasado jueves en el GAM, a propósito de... la locura.

Hace honor a su oficio experto de publicista y abre su presentación, la última del bloque de diseño, con un bombazo directo a las emociones: el Allegretto de la 7a. Sinfonía de Beethoven, con todo el peso y ese dramatismo profundo de sus cuerdas. Y en pantalla un compendio bellísimo de los paisajes futuristas de Blade Runner y el amor replicante entre K y Joi.

"Me impactó mucho Blade Runner, fundamentalmente es ciencia ficción, pero es la inspiración de la charla. Sostiene que en 30 años más aproximadamente no vamos a poder distinguir entre lo real y lo virtual, la separación será casi imposible, todo ya es muy parecido y eso se va a acentuar en una forma increíble. Ese es un impacto enorme en nuestras creencias, valores y vivencias, sin embargo es más antiguo de lo que parece.

¿Cómo es eso? Hice una conexión, llegué a una teoría: tratando de ver el aporte del hombre a la humanidad, me di cuenta de que la relación entre locura y creatividad es gigantesca. Parto de la base de que somos todos locos de remate, todos los grandes genios han sido todos locos y lo son quienes han hecho posible la civilización. Los seres humanos, como seres biológicos, no podemos distinguir entre percepción, ilusión y alucinación, como dice Maturana. El cerebro nos engaña. Y de ahí saqué la idea de que somos todos locos.

¿Todos? Toda la humanidad es absolutamente loca, parece mala onda decirlo, porque la definición de locura es mala onda: privación del juicio, tiene que ver con la demencia, con una patología, con algo incontrolable y así da cuenta la historia de la humanidad. Sin embargo hay otra definición maravillosa: aquello que excede mucho a lo ordinario o lo presumible, o sea lo extraordinario, fuera de lo común, que se sale de la norma

Historia de locos

Jurado en el certamen que premia los mejores trabajos de diseño y arquitectura en la Semana de la Madera que organiza Corma, Raúl Menjíbar resume siglos de genialidad pasando por Galileo, Newton, Einstein y Hopkins, encantando a la audiencia. "Platón sostenía que los poetas eran enfermos divinos y que la inspiración llegaba en un momento de locura divina. Heráclito se fue al chancho de loco y se sacó los ojos 400 años antes de Cristo para entender la realidad. Creó la teoría atómica, o sea realmente un genio. Se han hecho estudios proyectivos que dicen que este señor Da Vinci tenía un C.I. de 200. No solo es un pintor, inventó la sonrisa más linda de la historia del arte, un nuevo concepto del ser humano (el Hombre de Vitruvio), el Renacimiento que nos inspira hasta el día de hoy. Este loco, Steve Jobs, le cambió la vida a todo el mundo. Hoy día es normal andar con un celular, navegar por internet".

¿Y la relación entre locura y genialidad? Como todos nosotros, de repente yo voy al psiquiatra y le conté la teoría sobre que en mi opinión la inteligencia no es nada más que la administración de la locura.

Desde el punto de vista de la psiquiatría está espectacular, me dice. Y es también un poco la historia de mi vida. Imagínate, yo estudié publicidad el año 70, mi papá casi se murió, "...¡pero hijo te vas a morir de hambre!", etc. Tú ves la historia del Renacimiento, Van Gogh, Schiele, la Yayoi Kusama... ¡que trabaja en el psiquiátrico!, ¡no puede ser tanta maravilla! Es superinspirador porque nos reconcilia con una parte que todos tenemos, pero que no le damos permiso.

La puedes integrar, darle valor... Sobre todo en Chile, que somos un país tan eficiente, pero poco loco, aparece el deber ser, la culpa. Si nos damos permiso para ser locos, la forma de ser inteligentes es cómo administramos esa locura que es reprimida. Las autoridades, la sociedad, nosotros mismos nos asustamos de la locura, entonces a los 4 años nos meten a la escuela 'normal' y nos ponen ¡uniformes! Mi invitación es a reconciliarnos con la locura, que evidentemente tiene el punto de vista negativo de la psiquiatría, la demencia, pero tiene la otra versión muy positiva, una apertura de sensibilidad, de visión, para crear algo totalmente distinto.

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Wooden Mirror, una obra del 2014 de Daniel Rozin, mediante microcontroladores, cámara, motores y madera a modo de pixeles, logra plasmar la silueta de quien tenga enfrente.[/caption]

¿Y con la madera cuál es la relación? Yo solo quiero hacer una charla que inspire la capacidad creativa de los seres humanos. Yo me sorprendí con una cantidad de obras en madera que hay en las redes sociales y en internet realmente prodigiosas, museos maravillosos.

¿Por ejemplo? El que más me sorprendió fue un chico, Daniel Rozin, que hizo un espejo de madera, Wood Mirror, que tiene una cierta sensibilidad respecto a la figura que está al frente y la madera actúa como pixel. Te pones al frente y la madera cambia y reproduce tu figura pixeladamente. Otro artista, David C. Roy, hace arte kinético con madera muy interesante, lleva como 20 años en esto, o una muestra de arte kinético en el MIT Museum. Es bonita esa dualidad de la madera, siendo un material tan antiguo tiene un potencial para crear millones de cosas y como que no se agota nunca...

Es tan vieja y nueva a la vez... Exactamente, es superatractiva la relación, a mí el mundo del metal también me gusta mucho, yo soy bien urbano, pero la madera tiene algo mágico que tal vez es lo atávico. Expresa toda esa tradición gigantesca de generaciones, y eso tal vez nos impide ver el potencial que tiene hoy día, relacionarla con la actualidad y el futuro, la capacidad de diseñar sobre madera es infinita.

¿Y el link con la Semana de la Madera? Siendo Chile un país productor de madera de primera línea, es una oportunidad gigantesca para crear, no solamente el lindo diseño, por el lado estético, sino que también una funcionalidad más noble, más rica. El talento chileno yo siempre he tenido el sueño de que sea también relevante a nivel global, ¡hoy día el planeta está demasiado chico! Entonces en la medida en que los alumnos se involucren, se motiven, hagan buenos equipos de trabajo con sus profesores, tienen una posibilidad de darse a conocer y competir ya a niveles un poquito más ambiciosos. Yo creo mucho en el talento chileno. Deberíamos ser un poquito menos apagados sin ser arrogantes, conservando nuestra humildad, que me encanta, pero creérnosla, creer que somos capaces.

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